El mercado inmobiliario para este otoño...
Si atendemos a la situación anterior al estallido de la crisis del Coronavirus, las previsiones eran buenas, con un sector en crecimiento que atravesaba un buen momento hasta el inicio del estado de alarma.
- las rentas de alquiler aumentaban
- el precio por metro cuadrado se incrementaba y
- la construcción crecía según los indicadores oficiales.
En este contexto, "las oportunidades de recuperación para el sector inmobiliario se están manifestando como oportunidades de reinvención, tenemos que empezar a ser conscientes de que la manera que tenemos de relacionarnos con el cliente se está transformando y hay que adaptarse a ello. En primer lugar el sector ha debido adaptarse a los nuevos tiempos y así la tecnología ha llegado con trabajo en remoto, visitas de clientes por videoconferencia, implantación de la firma digital, etc. Por otro lado, el cambio en los gustos del comprador ha hecho que muchas personas se planteen nuevas cualidades esenciales en la casa que desean y apuesten por viviendas con más luz, más superficie, más domótica e incluso con más espacio exterior. Hasta ahora los precios seguían una trayectoria ascendente que es más que probable que en la actualidad sufran un estancamiento por lo que los inversores verán en el sector inmobiliario, un mercado refugio, ya que no se producirán bruscas oscilaciones como pueden ocurrir en sectores más relacionados con los movimientos de los mercados financieros" explica Gema Montero, gerente del Grupo Solyhogar.
No cabe duda de que la recesión económica que vivimos va a afectar a la economía. De momento se ha llevado por delante muchos puestos de trabajo y empresas que se han visto obligadas a cerrar. A diferencia de la crisis del 2008, esta vez no existe una burbuja inmobiliaria provocada por la especulación que provoca el aumento de precios de la vivienda al máximo. Pero esta pandemia ha afectado a millones de viviendas que han visto su precio modificado por el lado de la oferta, con propietarios que necesitan dinero y están dispuestos a vender rapidamente. Esto hace que el comprador pueda ejercer más presión y por tanto una bajada del precio final. Todo ello, unido a las "ganas de cambiar de vivienda" despertadas por un duro confinamiento, puede dar lugar a que la recuperación en este sector pueda ser más rápida de lo esperado.
"Es probable que el sector inmobiliario de respuesta a esta nueva demanda y si la economía se mantiene en una evolución razonable, esta demanda pueda llegar a concretarse en el cierre de operaciones. Si bien el sector sanitario está siendo clave para superar la crisis sanitaria provocada por el COVID-19, somos muchos los que estamos de acuerdo en que el sector inmobiliario lo será para superar la crisis económica derivada." concluye Gema Montero.